Latido

Se adereza una sonrisa
y se plasma una caricia.

Se entretiene el destino
dándonos nuestro cariño.

Hemos sido amantes.
Lo fuimos antes.

Vinimos al mundo
para enlazarnos en abrazo.

En un solo quejido
que amparaba nuestro latido.

Negados

Dejaremos de contar con ellos, 
los otros. 
Nos buscaremos la vida solos.

Y.
Sálvese quien pueda.
Aquí, tonto el último.

El último que cierre la puerta.

Consiguieron su propósito.

Que nadie salve a nadie,
porque todos somos náufragos
y no hay bote salvavidas que nos aguante.

La vida se ha enfangado.

No en retorno,
que atrás quedaron otros lodos.
Ahora son detritos de podredumbre que ingerimos.

Hemos quedado a su merced.

Nos hemos descuidado
en el balanceo plácido y complacido
dejándoles hacer.

No es lo mismo.

Nuestros abuelos tenían tierra 
en la que sembrar y recoger.

Hoy esa tierra privatizada y diezmada
impide el sufragio a que estamos abocados.

Nos han dado.

Placados.
Noqueados.
Noeados.

Apunto

La palabra escrita cierra las puertas a la imaginación que la imagen suscita.

Apuntes 4/4/13

Vivifico el sentimiento.
Aliento y palpito en él.

Hago pazo para mi pecho
embargado de placer.

Ciega la mirada,
¡ve!
Alerta,
expectante mira.

XVI - Espejo - nubes

Algo me atrajo hacía él.

Atravesé el espejo y tendí mis brazos.

Fue una sensación difícil de asimilar, y menos de explicar.

Mis últimos recuerdos me traen un momento, un instante.

Estábamos hablando de futuro.

Hacíamos planes.

Mirábamos las nubes.

Es cierto.

Las mirábamos.

Entonces.

Entonces quedé sola.

Perdí suelo.

Me vi atraída y no dude en tender mi mano para alcanzarlas.

Eran las negras nubes que me elevaban.

Me llevaban con ellas.

No pensé en nada.

El instante me dejó sin pensamientos.

Dirás que he soñado.

Di lo que te parezca.

Sé que estuve en un lugar futuro que me espera.